El sabio es compasivo…
“Una mente ardiente es una mente de FUEGO. El fuego consume todo lo que se le echa, lo asimila, lo consume y hay que seguir alimentándolo, sino se apaga.” (Juan Viñas)
El fuego-mente se enciende si le echas preguntas, si cuestionas, de lo contrario, la llama se apaga y uno ignora lo que ignora… Si pasamos por la vida sin preguntas es que aún estamos dormidos.
El fuego se acrecienta en el calor (velocidad con que consume). A medida que más cuestiono, más ignorancia sé que albergo…la complejidad se agranda… y más hambre de preguntar surge.
Tener una mente ARDIENTE es estar despiertos a los RETOS de la vida, personales y colectivos. No hay separación en una mente ardiente… su capacidad de ver la telaraña todo lo entrelaza.
El fuego con sus preguntas aviva el FUEGO DE LA EXPERIENCIA. El fuego nos TRANSMUTA, TRANSFORMA en la experiencia, en las acciones más conscientes.
No basta con la pregunta, con la observación, comprensión e integración…hay que hallar y aprender a SER la respuesta… es en la vivencia que EVOLUCIONAMOS. De no ser así, el fuego se apaga… porque le echaremos siempre las mismas preguntas y se extingue… al no ASUMIR el PODER INTERNO, la llama interna para la acción.
Una mente ardiente ve cada ley de causa-efecto individual mostrando el vínculo con la telaraña de la totalidad. Todo karma individual tiene una pregunta y una respuesta en cada una de las partes de la totalidad… todo es un fractal… todo está interconectado…
Las mentes ardientes parecen contradictorias… lo que sucede es que comprenden más movimientos!!! No dan las mismas respuestas, son impredecibles por su evolución constante al ver mucha más complejidad (más detrás de los detrás).
Hay un detalle.
El fuego de la sabiduría no se alimenta con leños ajenos… No bastan los libros, los maestros, los mensajes con los que “resonamos”… si nos quedamos ahí, re “SONAMOS” (estamos en el horno, bah), porque no evolucionamos al no activar la llama interna…
Sirve el “leño mojado” si lo reconocemos como tal… ahí somos capaces de ver lo que NO cuestionamos y no vemos (aun) por nosotros mismos. Si no es así… el fuego es muy débil y sirve para cocinar comidas de “otros”.
Hay mentes apagadas o que funcionan con fuegos artificiosos. Por ello creen que la solución es eliminar los “efectos”, negándolos o tergiversándolos (borrar el pasado, no SOLIDARIZÁNDOSE con infinitos artificios para confundir). Los fuegos artificiosos inducen las preguntas para que se hallen respuestas analógicamente artificiales, conllevan la NO cuestión, la obediencia, sumisión y no acción, porque temen que las mentes ardientes se ORGANICEN. Hay mil artificios y atajos para confundir y no SOLIDARIZARSE (es “su karma” y mi felicidad es “mía”, como que un sabio busca SU LOGRO).
Mantener la mente ardiente es ver más complejidad en el detrás del aparente detrás… más causas detrás de las causas… ver la trama que LAS UNE y solidariza. Ahí está la llave…
Siempre la utopía es el camino… así el fuego está en permanente combustión… para perfeccionar este mundo-mente imperfectos. Ver para aprender a SER en el hacer. En ese fuego de la acción más consciente de la unión hay evolución…
“Una mente ardiente es una mente de FUEGO. El fuego consume todo lo que se le echa, lo asimila, lo consume y hay que seguir alimentándolo, sino se apaga.” (Juan Viñas)
El fuego-mente se enciende si le echas preguntas, si cuestionas, de lo contrario, la llama se apaga y uno ignora lo que ignora… Si pasamos por la vida sin preguntas es que aún estamos dormidos.
El fuego se acrecienta en el calor (velocidad con que consume). A medida que más cuestiono, más ignorancia sé que albergo…la complejidad se agranda… y más hambre de preguntar surge.
Tener una mente ARDIENTE es estar despiertos a los RETOS de la vida, personales y colectivos. No hay separación en una mente ardiente… su capacidad de ver la telaraña todo lo entrelaza.
El fuego con sus preguntas aviva el FUEGO DE LA EXPERIENCIA. El fuego nos TRANSMUTA, TRANSFORMA en la experiencia, en las acciones más conscientes.
No basta con la pregunta, con la observación, comprensión e integración…hay que hallar y aprender a SER la respuesta… es en la vivencia que EVOLUCIONAMOS. De no ser así, el fuego se apaga… porque le echaremos siempre las mismas preguntas y se extingue… al no ASUMIR el PODER INTERNO, la llama interna para la acción.
Una mente ardiente ve cada ley de causa-efecto individual mostrando el vínculo con la telaraña de la totalidad. Todo karma individual tiene una pregunta y una respuesta en cada una de las partes de la totalidad… todo es un fractal… todo está interconectado…
Las mentes ardientes parecen contradictorias… lo que sucede es que comprenden más movimientos!!! No dan las mismas respuestas, son impredecibles por su evolución constante al ver mucha más complejidad (más detrás de los detrás).
Hay un detalle.
El fuego de la sabiduría no se alimenta con leños ajenos… No bastan los libros, los maestros, los mensajes con los que “resonamos”… si nos quedamos ahí, re “SONAMOS” (estamos en el horno, bah), porque no evolucionamos al no activar la llama interna…
Sirve el “leño mojado” si lo reconocemos como tal… ahí somos capaces de ver lo que NO cuestionamos y no vemos (aun) por nosotros mismos. Si no es así… el fuego es muy débil y sirve para cocinar comidas de “otros”.
Hay mentes apagadas o que funcionan con fuegos artificiosos. Por ello creen que la solución es eliminar los “efectos”, negándolos o tergiversándolos (borrar el pasado, no SOLIDARIZÁNDOSE con infinitos artificios para confundir). Los fuegos artificiosos inducen las preguntas para que se hallen respuestas analógicamente artificiales, conllevan la NO cuestión, la obediencia, sumisión y no acción, porque temen que las mentes ardientes se ORGANICEN. Hay mil artificios y atajos para confundir y no SOLIDARIZARSE (es “su karma” y mi felicidad es “mía”, como que un sabio busca SU LOGRO).
Mantener la mente ardiente es ver más complejidad en el detrás del aparente detrás… más causas detrás de las causas… ver la trama que LAS UNE y solidariza. Ahí está la llave…
Siempre la utopía es el camino… así el fuego está en permanente combustión… para perfeccionar este mundo-mente imperfectos. Ver para aprender a SER en el hacer. En ese fuego de la acción más consciente de la unión hay evolución…
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